El Barcelona obligó a su eterno rival, el Real Madrid, a jugar el resto de la temporada con una mentalidad de “no permitir errores”.
El Barcelona fue acabando poco a poco con el Real Madrid.
Una victoria por 1-0 sobre Mallorca la madrugada del miércoles (23 de abril) ayudó al Barcelona a llevarse los 3 puntos y crear una brecha de 7 puntos con el Real Madrid en la clasificación de La Liga, justo antes del crucial partido El Clásico.
Aunque fue una victoria por la mínima, fue un partido decisivo en la carrera por el campeonato de esta temporada, como forma de acabar con la ambición del Real Madrid de dar la vuelta a la situación.
El equipo catalán realizó 40 remates a lo largo del partido, una cifra impresionante, pero sólo una vez encontró el fondo de la red. El único goleador, Dani Olmo, aprovechó una buena combinación inicial del segundo tiempo para meter el balón en la portería del Mallorca.
Ese fue el partido en el que el entrenador Hansi Flick decidió rotar mucho a su plantilla para ahorrar energías para la final de la Copa del Rey contra el Real Madrid del fin de semana, cuando una serie de jugadores clave estuvieron en el banquillo. Ansu Fati también disputó su primera titularidad en La Liga desde octubre.
Sin embargo, a pesar del gran cambio de plantilla, el juego del Barcelona siguió funcionando con fluidez, creando una serie de oportunidades. En la primera mitad, Ferran Torres fue el único que protagonizó muchas situaciones de peligro.
Lamine Yamal también tuvo 10 tiros, perturbando continuamente la defensa del oponente. Desgraciadamente, el portero del Mallorca, Leo Román, tuvo un día excelente, con un total de 10 paradas, lo que hizo que el Barça se llevara la mano a la cabeza con remordimientos en muchas ocasiones.
Pero lo importante es que la victoria llegó y con ella un fuerte mensaje al Real Madrid: cualquier tropiezo ahora puede suponer el fin de sus esperanzas de defender el título.
El Barça consiguió una victoria importante.
El Real Madrid debe ganar definitivamente al Getafe mañana por la mañana (24 de abril), si no quiere quedarse muy atrás en la carrera, porque después tendrá que enfrentarse al Barcelona en el partido El Clásico de La Liga el 11 de mayo.
Con una forma estable y un calendario más favorable, el Barça tiene claramente la iniciativa en sus manos.
La victoria ayudó al Barcelona a dar un gran paso hacia el campeonato de La Liga. Aún tienen 5 jornadas por delante, pero si superan al Real Madrid en el próximo Clásico, casi nadie podrá impedir que Flick y los suyos ganen el campeonato.
El Barça, con la ventaja de los puntos y la moral alta, da pasos firmes hacia la gloria. No necesitan ser explosivos, sólo precisos, y eso está dejando al Real Madrid sin vuelta atrás.
Para el entrenador Carlo Ancelotti y su equipo, están a punto de atravesar una temporada desastrosa tras perder ante el Arsenal en la Liga de Campeones y pronto podrían rendirse en la carrera de La Liga ante el Barcelona.
La Liga aún no ha terminado, pero tras la noche en Montjuïc, el Real Madrid entiende que sus esperanzas ahora son muy frágiles.