Xavi Hernández dejó el FC Barcelona tras finalizar la temporada 2023/24, poniendo fin a un reinado de dos años y medio como entrenador del primer equipo.
Si bien la temporada recién concluida no fue del todo bien para Xavi y el Barça, la leyenda del club deja un legado de desenterrar y confiar en los jóvenes de la academia, una hoja de ruta que el nuevo entrenador Hansi Flick pretende seguir.
Uno de los mayores aspectos positivos de la temporada pasada fue la explosión de un tal Lamine Yamal.
Xavi hizo debutar al joven extremo de La Masia con sólo 15 años y mostró una confianza inequívoca en el adolescente en la campaña 2023/24, ayudándolo a convertirse en un pilar a pesar de tener 16 años.
No se puede negar que Xavi merece mucho crédito por ayudar a Yamal a alcanzar las alturas que alcanzó el año pasado, convirtiéndose en un elemento habitual del Barcelona y España.
El único arrepentimiento de Xavi
Pero es probable que el excentrocampista y entrenador del Barcelona se haya ido con un gran arrepentimiento cuando se trata del chico prodigio de 16 años: la fatídica sustitución contra el PSG.
Xavi vio la tarjeta roja ante el PSG.
Todo se remonta al 16 de abril en el Estadio de Montjuic, cuando el Barcelona se enfrentó al PSG en el partido de vuelta de los cuartos de final de la UEFA Champions League.
Después de ganar el partido de ida en Francia por 3-2 y tomar ventaja temprana en Cataluña gracias a Raphinha, el Barça estaba en el asiento del conductor y parecía preparado para un puesto en las semifinales.
Sin embargo, una mala decisión y un temerario de Ronald Araujo cambiaron todo. El internacional uruguayo fue expulsado cerca de la media hora, lo que dejó al Barça con diez hombres y el PSG remontó para imponerse por 4-1 (6-4 en el global).
Yamal debería haberse quedado
Cuando Araujo fue expulsado, el Barça se quedó con un defensa corto, lo que obligó a Xavi a reforzar la zaga con la introducción de Íñigo Martínez como suplente.
Sin Yamal, el Barça perdió a su mayor amenaza en ataque.
Pero fue a expensas de un tal Lamine Yamal, lo que resultó ser una decisión equivocada en retrospectiva.
El joven de 16 años había sido la mayor amenaza de los blaugrana en ataque y con el PSG persiguiendo el partido, su presencia habría permitido al Barça aprovechar los espacios que dejaban sus rivales.
Aunque estuvo en el campo sólo media hora, Yamal terminó el partido con el xA más alto entre ambos grupos de jugadores. La sustitución del extremo español prácticamente eliminó cualquier aguijón que poseía el ataque de los catalanes esa noche.
Se podría haber argumentado a favor de la sustitución de Robert Lewandowski, que no estaba funcionando a toda máquina. Tener a Yamal en el campo habría permitido al Barcelona representar una mayor amenaza en el descanso mientras el PSG presionaba para volver a meterse en la eliminatoria.
Al final no fue así y la eliminación de la Champions acabó influyendo en la decisión del club de despedir a Xavi.