Roger Federer y Carlos Alcaraz se sentaron juntos y vieron a Jannik Sinner conquistar otro título cuando el número uno del mundo superó a Novak Djokovic.

Roger Federer y Carlos Alcaraz fueron vistos sentados juntos mientras Jannik Sinner vencía a Novak Djokovic para ganar el Masters de Shanghai. Sinner, que ya tiene garantizado terminar la temporada como número uno del mundo, fue demasiado fuerte para Djokovic, logrando su cuarta victoria en sus últimos cinco partidos contra el serbio con un triunfo por 7-6 (4) 6-3.

Eso le negó a Djokovic su título número 100 de su carrera, aunque esta semana ha sido otro recordatorio de que el tenista de 37 años sigue siendo un factor muy importante en la cima del tenis. Había algunos jugadores ilustres, tanto antiguos como actuales, entre los 12.000 espectadores.

Entre ellos se encontraban Federer y Alcaraz, cuyos caminos rara vez se habían cruzado hasta hace poco. La presencia de Alcaraz fue una sorpresa para algunos, dado que su interés en el torneo se había acabado en la fase de cuartos de final a manos de Tomas Machac.

Una de las razones por las que se ha quedado, junto con su padre Carlos y su hermano Álvaro, es el hecho de que viajará directamente a Arabia Saudita para competir en el ‘Six Kings Slam’, que comienza el miércoles. Sinner y Djokovic harán el mismo viaje.

La otra razón por la que Federer y Alcaraz se sentaron juntos fue su asociación compartida con la marca de relojes de lujo Rolex, patrocinador principal del torneo, de la que ambos son embajadores. Federer dijo en septiembre, antes de la Laver Cup, que estaba deseando pasar tiempo con Alcaraz.

El suizo dijo que le debía una disculpa al español por rechazar la oportunidad de tener tiempo de práctica adicional con el joven. La pareja una vez golpeó juntos en Wimbledon cuando Federer estaba en su apogeo mientras Alcaraz era un junior.

A Federer se le ofreció la oportunidad de golpear con Alcaraz nuevamente al día siguiente, pero la rechazó, prefiriendo practicar con el entrenador del joven, Juan Carlos Ferrero. Recordó haber dicho: “No, está bien, prefiero calentar con su entrenador”.

Sin duda, la pareja quedó impresionada con el último triunfo de Sinner, ya que el italiano no enfrentó ningún punto de quiebre en la victoria en sets seguidos sobre Djokovic. Sinner dijo: “Obviamente, fue un partido muy difícil.

“Jugar contra Novak es uno de los retos más difíciles que tenemos y, obviamente, estoy muy, muy contento de cómo manejé la situación. Estaba sacando muy bien en el primer set, realmente no pude encontrar la manera de romperle el servicio.

“Jugué un muy buen quiebre en el primer set, lo que me dio la confianza para comenzar bien el segundo set y, obviamente, estoy muy contento con el rendimiento durante todo este torneo. Obviamente, es un torneo muy especial”.