Barcelona hace una oferta sorprendentemente baja por Chiesa
Pocos se imaginaron que un extremo, considerado anteriormente como una futura estrella del fútbol italiano, ahora estaría siendo ofertado a un precio irrisorio.
Federico Chiesa ha anotado 32 goles en todas las competiciones durante sus cuatro temporadas en la Juventus. Hace tres años, a los 23, el exjugador de la Fiorentina fue parte del equipo de Italia que ganó la Eurocopa 2020.
Federico Chiesa está en el radar del Barcelona este verano.
Sin embargo, las cosas cambiaron después. Chiesa sufrió una caída en su rendimiento y ya no forma parte de los planes del nuevo entrenador Thiago Motta, a pesar de haber anotado 10 goles en todas las competiciones la temporada pasada.
Recientemente, Barcelona presentó a la “Vecchia Signora” su primera oferta para fichar al extremo de 26 años. Según el periodista italiano Mirko Di Natale, la oferta de transferencia de Barcelona ronda los 10 millones de euros.
El club catalán también ha ofrecido a Chiesa un salario de 6 millones de euros, sin incluir bonos, mientras que su contrato actual con el equipo italiano solo tiene un año más de vigencia.
Desde Turín, se informa que la Juventus solo dejaría ir al jugador si reciben 15 millones de euros. Por su parte, Chiesa también exige un contrato de al menos tres años del club que quiera ficharlo.
Para Barcelona, en este momento, cualquier reducción de 1 o 2 millones de euros en la tarifa de transferencia se consideraría un éxito, debido a los problemas financieros del club. Por lo tanto, el club catalán no puede permitirse gastar de más y pagar un precio elevado.
Según Sport, es probable que Barcelona venda a Clément Lenglet y permita que İlkay Gündoğan se vaya libre para reducir la carga salarial. Solo así, el ex campeón de La Liga podrá fichar nuevos jugadores.
Chiesa no es la prioridad principal de Barcelona en la ventana de transferencias de verano de 2024. El club del Camp Nou estaba interesado en Nico Williams del Athletic de Bilbao. Sin embargo, el internacional español decidió seguir comprometido con su club actual, lo que obligó a Barcelona a buscar rápidamente una alternativa.