En una entrevista con Servimedia, García Martín explicó que el Gobierno regional que encabeza Isabel Díaz Ayuso piensa acudir al Consejo de Política Fiscal y Financiera de este mes de julio con el propósito de defender los “principios de multilateralidad y de solidaridad” a la hora de aprobar un nuevo modelo que sustituya al vigente desde 2009 y que ninguno de los gobiernos de Mariano Rajoy y de Pedro Sánchez ha sido capaz de actualizar en tres lustros.

“La Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (Lofca) establece el principio de multilateralidad y de solidaridad, es decir, que la negociación del sistema de financiación autonómico se tiene que hacer de manera multilateral en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera, donde entre todos decidamos cómo tiene que ser la financiación de los servicios tan importantes como la sanidad, la educación, el transporte público, los servicios sociales”, afirmó.

A su juicio, cuando el PSOE y sus socios hablan de una “financiación singular” para Cataluña están tratando de cambiar la realidad poniendo “adjetivos a cosas que son muy sencillas”, pues recalcó que tanto la Constitución como la Lofca establecen con claridad el “principio de solidaridad” entre territorios.

Adujo como prueba que “Madrid es la comunidad más solidaria, es la que más aporta a la caja común, que permite no solo la financiación de los servicios públicos en nuestra región, sino también en el resto de comunidades autónomas”. “Y lógicamente en eso tenemos que contribuir todos. También Cataluña, en la financiación del conjunto del Estado y de los propios servicios públicos”, apostilló.

García Martín avanzó que, en la negociación autonómica con el Ministerio de Hacienda, la Comunidad de Madrid “siempre va a exigir multilateralidad” a la hora de renovar el modelo actual, de manera que no haya un trato diferenciado para Cataluña ni en el proceso ni en el nuevo sistema de financiación.

SINGULARIDADES NEGOCIADAS MULTILATERALMENTE

Señaló que debe ser “en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera donde entre todos negociemos la mejor financiación”, sin perjuicio de que cada autonomía demande “que se atiendan singularidades como la insularidad, la dispersión geográfico o el envejecimiento de la población”.

En el caso de Madrid, indicó que el gobierno regional de Ayuso reclamará que se tenga en cuenta “el importante incremento de población experimentado en nuestra región” durante la última década. “Lógicamente, todas esas variables habrá que negociarlas de manera multilateral para que entre todos establezcamos el mejor sistema de financiación” pero “sin financiaciones a la carta”, como exigen los socios independentistas del PSOE, porque eso supondría dar una mejor financiación a Cataluña “a cambio de votos, que es lo que pretende en este momento el Gobierno de Pedro Sánchez”.

El consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid rechazó frontalmente que Cataluña pueda obtener “un estatus privilegiado” en la financiación autonómica y adujo que eso “no lo necesita” ni esa región ni el conjunto de España, sino que únicamente conviene a Pedro Sánchez “porque él necesita esos votos” de los partidos separatistas en el Congreso “para mantenerse en La Moncloa”.

García Martín razonó este argumento en que los partidos independentistas llevan tiempo pidiendo “una financiación a la carta” y concluyó que en todo lo relacionado con Cataluña “los únicos que están diciendo la verdad en todo esto son los partidos independentistas”, lo que contrapuso al comportamiento del Ejecutivo socialista.

“Ahora lo que piden es el referéndum de independencia y pedirán una financiación a la carta para Cataluña. Y es que son los únicos que en todo este en todo esto están diciendo de verdad lo que lo que van a exigir y lo que Pedro Sánchez está dispuesto a dar a cambio de votos. Por eso, yo decía que es una suerte de corrupción, porque es financiación y cesiones a cambio de votos para que él mismo se pueda mantener en La Moncloa”, insistió.

También criticó que el Ejecutivo de Sánchez esté dispuesto a condonar la deuda de la Generalitat de Cataluña e incluso extender ese beneficio financiero al resto de las comunidades, al entender que beneficia a territorios que han promovido en los últimos años el “gasto superfluo” como “embajadas en el extranjero”.

Frente a ello, ensalzó la “fiscalidad equilibrada” de la Comunidad de Madrid “con los impuestos más bajos de toda España”, aplicados dentro del mismo “marco normativo” que las demás comunidades, lo cual definió como “un caso de éxito porque permite tener los impuestos más bajos de toda España y al mismo tiempo tener los mejores servicios públicos”.

“En nuestro caso, hemos visto que la política que desarrolla la Comunidad de Madrid es la mejor, en el sentido de que no solo está permitiendo que los madrileños sean los que se benefician de los impuestos más bajos de toda España, sino que además, a través de ese dinamismo económico que estamos consiguiendo, incrementamos la recaudación que nos permite financiar y mejorar la calidad de los servicios públicos al tiempo que ayudamos a otras regiones a financiar los suyos propios”, concluyó.