En el pequeño islote de Heping, frente a la costa de Keelung, a unos 30 kilómetros al nordeste de Taipéi (Taiwán), se fundó en 1626 la colonia de San Salvador de Quelang. Pese a tratarse de una zona densamente urbanizada, la parcela donde se emplaza el área de actuaciones arqueológicas, en pleno centro urbano, ha preservado una completa estratificación que permiten estudiar las diferentes fases de ocupación.
El 1 de mayo se iniciaba una nueva campaña de actuaciones arqueológicas en el yacimiento de Heping Dao B (Keelung, Taiwán) que ha finalizado el 15 de julio. El proyecto, codirigido por la Dra. María Cruz Berrocal (IIIPC, Universidad de Cantabria) y el Dr. Tsang Chenghwa (National Tsing Hua University), iniciaba su andadura en 2011 y hasta la fecha se han llevado a cabo 5 campañas de excavaciones arqueológicas, con financiación de diversas instituciones, incluyendo el CSIC, la Universidad de Konstanz, el Ministerio de Economía y el Ministerio de Cultura de España, la Chiang Ching Kuo Foundation, y la Fundación Palarq.
La completa estratificación del yacimiento nos ha permitido conocer las características del asentamiento prehistórico en toda la duración de este período, con viviendas tipo palafítico, ajuares cerámicos completos localizados in situ y un interesante repertorio de industria lítica con utensilios y ornamentos realizados en nefrita, pizarra, esquisto, etc. La ocupación del asentamiento no parece interrumpirse y se han podido documentar claros indicios del dinamismo de las comunidades prehistóricas taiwanesas, que incluye el desarrollo autóctono de la metalurgia del hierro, y contactos con comunidades chinas continentales y del sudeste asiático. Estos temas son clave ahora mismo en la arqueología prehistórica de Asia-Pacífico.
En cuanto a la colonia española, durante los años del proyecto se han localizado los restos de la iglesia dominica de San Salvador, enterramientos asociados a la colonia europea –española primero y holandesa después– así como importantes indicios del poblado aborigen emplazado en el lugar donde se asentó parte de la colonia.
Con estos resultados, Heping Dao B pasa a convertirse en un yacimiento de referencia en el área Asia-Pacífico no solo para el periodo colonial europeo sino también para los periodos prehistóricos precoloniales.
Durante la campaña de 2019 hemos documentado nuevos restos constructivos de la iglesia conventual con la localización de su cabecera, dotada de un ábside de planta cuadrangular, tres nuevas inhumaciones localizadas en el interior del templo y dos más localizadas al exterior. Varios de los enterramientos presentan las manos entrelazadas en posición orante y en una de las tumbas se ha encontrado una pequeña cruz fragmentada, posiblemente de bronce, que parece de origen peninsular.
El conjunto de enterramientos documentado en Heping Dao es de gran interés. Se dividen en dos grupos: los orientados W-E (4 individuos) y N-S (4 individuos) además de un infantil enterrado según el rito aborigen y una tumba vacía en el interior de la superficie de la iglesia, que es posible en principio asociar con la exhumación de uno de los misioneros al ser evacuados los españoles de Heping Dao. Los restos de dicho misionero, considerado un hombre santo, fueron transportados por los españoles a Manila, según los documentos. Su tumba ocupaba un lugar preferente junto al altar de la iglesia.
Con estos enterramientos hemos documentado por primera vez en el área de Asia-Pacífico restos de personas europeas que murieron en la región en los primeros decenios de la fase colonial. En Heping Dao las dataciones de estos restos responden a una horquilla cronológica muy precisa, 1626/1668, lo que les confiere un valor arqueológico añadido. A esto se añade la posibilidad de realizar estudios precisos de ADN e isótopos por primera vez en la zona, no solamente de europeos, con el reto metodológico que ello conlleva, sino también de otras poblaciones locales y de Asia-Pacífico, también enterradas en el cementerio de Heping Dao. De estos análisis se ocupa el Max Planck Institute de Jena, Alemania, quién a través de su investigadora Selina Carlhoff, que ha viajado a Heping Dao en la presente campaña, ha extraído exhaustivamente muestras (preferentemente de hueso petroso) para subsiguientes análisis. Además se ha prestado especial atención a los estudios botánicos con la presencia del Dr. Alexandre Chevalier (Royal Belgian Institute of Natural Sciences), que se ha ocupado de la supervisión de los trabajos de flotación encaminados a la recuperación de restos botánicos tanto del período prehistórico como del colonial. Para ambos contamos con cuestiones de investigación específicas que despiertan gran interés en la arqueología del Pacífico, en particular la expansión de las especies domésticas durante el neolítico y la introducción de nuevas especies por los colonos europeos.
Durante estos dos meses se ha puesto especial interés en la formación de los arqueólogos taiwaneses y estudiantes en la excavación estratigráfica del yacimiento. Este tipo de excavación es prácticamente desconocida en Taiwán, y por ello nuestro proyecto ha aportado valor añadido que los taiwaneses valoran enormemente. No solamente a nivel académico nuestro trabajo es reconocido por lo que tiene de innovador y por su calidad, sino que nuestros trabajos arqueológicos han despertado una gran expectación mediática a lo largo de toda la campaña. Esto se ha traducido en nuestra participación en el rodaje de un documental sobre el periodo colonial y en la presencia habitual en la excavación de medios de comunicación de ámbito local y nacional con entrevistas televisivas y en prensa escrita. Hemos recibido repetidas visitas del alcalde de Keelung quien ha transmitido su agradecimiento al equipo español por la gran aportación al conocimiento de su pasado, legado histórico que había permanecido inédito hasta el inicio de este proyecto arqueológico en el año 2011. El parking donde se localiza el yacimiento ha pasado a ser declarado zona protegida de interés arqueológico y el consistorio, en colaboración con el gobierno central de Taiwán, está desarrollando un proyecto para levantar en el sitio un centro de interpretación o museo con parte de los restos localizados conservados in situ. El yacimiento lo merece ya que ha situado a Heping Dao, un lugar económicamente desfavorecido en la historia reciente del país, en la órbita de estudios académicos de gran nivel y potenciales visitas en número creciente, ya que los restos arqueológicos conservados y excavados son únicos en la esfera de Asia-Pacífico y gran parte del Pacífico en general.